La historia de un sueño de familia

Entrevista con el guionista de El Documental mexicano ‘El Último Trapiche’

El documentalista mexicano Oliver Ramos Gómez estuvo en el 4to Festival internacional de Cine Documental de La Villa de Los Santos, presentando El Último Trapiche (2014). El cortometraje de 40 minutos cuenta la historia de Conchi Gómez, una mujer que a pesar de los años lucha por conservar la producción de panela de caña de azúcar en el último trapiche de Acatlán de Osorio, en el mexicano Estado de Puebla, donde hasta hace algunos años había más de 30 trapiches, actividad que mermó de la mano con la reducción de fuentes de agua en la región.

Oliver trabajó en el Guión del documental a partir de la necesidad de contar las razones por las que se extinguieron los trapiches de su pueblo, los sentimientos de las personas ante la desaparición de los mismos y la motivación por demostrar desde el ejemplo de la historia de su familia, que con pasión y esfuerzo se podría continuar con la tradicional producción de panela que una vez caracterizó a Acatlán de Osorio.

Este cortometraje se desarrolló a partir del guión literario que se presentó como propuesta en la IV Convocatoria para la producción de Documentales de Puebla, México, donde se aportaron datos históricos de los Trapiches, y sobre el estado y ubicación de los mismos. La investigación comenzó 12 meses antes del rodaje durante la zafra del año anterior, cuando los productores conocieron a los personajes y protagonistas de la historia: la familia Cajica Gómez, los trabajadores y vecinos del Trapiche, además de las personas que consumen de esta panela para la preparación de comida tradicional.

“Luego de hacer la investigación de campo, fuimos a buscar a personas claves en el pueblo, historiadores, poetas, escritores, y ahí ellos se dieron cuenta que el Trapiche Guadalupe era el último. Con toda esa información se hizo el guión para ver lo que se iba a hacer ” indicó Oliver, y explicó que luego el guión se escribió cronológicamente como va el mismo proceso de la caña, desde el corte de los cañaverales por los trabajadores, luego el transporte, el molido y procesamiento hasta la producción final de la panela. “De ahí nos fuimos buscando las huellas de otros trapiches antiguos ya en ruinas, y nos fuimos encontrando con otros personajes”, agregó.

El guionista de El Último Trapiche advirtió que hay cosas que no se pueden prever en el guión técnico de un documental, “pues las vas descubriendo en el camino, lo que hicimos fue ordenar las ideas de la historia que queríamos contar”, y los espectadores podemos dar fe que lo hicieron muy bien. “El consejo para quienes están por iniciar el guión de un documental como este, es hacer una guía lo más acabado posible y planificar todo lo que puedas, pues esto facilita mucho el proceso de montaje y edición, sin embargo no hay que limitarse o cerrarse solo a lo previsto en el guión”. Otro aspecto importante es no olvidarse de pedir los permisos que sean necesarios en las locaciones antes de ir a grabar”, concluyó.

El Documental se presentó el martes 13 de octubre en el Auditorio de La Escuela de Artes Folclóricas de La Villa de Los Santos y obtuvo el aplauso y reconocimiento del público.